<div id=»img_marco»><img src=»/gtd/images/trato.intuitives.jpg» alt=»relación empleado empresa» /><br />Foto de <a href=»http://www.sxc.hu/profile/intuitives» title=»Relación empleado empresa»>intuitives</a></div>Seguimos encerrados en los viejos valores, doctrinas de poder y de miedo, fichando en la entrada y la salida, haciendo ver que podemos ser y escondiendo lo que realmente somos. Juzgados por valores que son siempre subjetivos por personas que ni nos han visto ni nos conocen. Una relación tensa donde decimos que nos sustentamos por unos valores profesionales, cuando en realidad jugamos con la dualidad.
Hay que cambiar ese concepto, sino estamos predestinados a la frustración y al estrés a ir corriendo de un lado a otro, desganados y sin motivación. Este es un ciclo laboral bastante interesante para realizar esas modificaciones, todos necesitamos de esos cambios, los hay de más profundos y trascendentales, necesarios para poder embarcarnos en una nueva relación.
Esta es una lista de cambios necesarios para vislumbrar la nueva relación con el mundo laboral y empresarial. Una base en la que cada uno como persona debemos aportar a nuestro ámbito de influencia para hacer del cambio una realidad.
Yo
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El primer cambio ya lo hemos tratado, es un cambio personal. Si estás de acuerdo con que los viejos valores ya no sirven para encontrar una saludable relación con la empresa, el primer paso lo debe hacer uno mismo. Sin ese cambio interior, todo lo que intentemos levantar a posteriori serán naipes en una tormenta. Alimenta tu ética, tu integridad, haz un manual de ti mismo para que puedas estudiarte y entonces, proyéctate trazando un mapa de tus necesidades y sueños.
El respeto que buscas en los demás primero debes ganártelo para ti mismo. Encuentra cuales son tus principios, cuales son los valores que te mueve, se asertivo contigo mismo y con todas las relaciones. El respeto hacia lo que estás creando contigo mismo, permite un cambio en tu propio exterior.
Productividad Personal
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Encuentra el método de productividad personal que se adapte a tu vida y si es con GTD mejor. No hay nada más agradable que tener un control de tu vida. Independientemente de lo que hagas o de lo que quieras, debes tener plena organización de tu entorno, de tus relaciones, de tus objetos. Debes saber que tus proyectos avanzan, en el sentido que tú quieres que lo hagan.
La productividad personal alcanza su máxima expresión cuando hemos cultivado un yo interior fuerte e íntegro, cuando tenemos unos valores base para respetarnos a nosotros mismos, cuando asociamos nuestra vida a proyectos independientes.
Proactividad
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Este es un terreno subjetivo y peligroso. Uno puede ser proactivo en lo que hace, en sus planificaciones, en el desarrollo de su trabajo, pero un exceso de proactividad puede llevar a consumir recursos y energías innecesarios. Debes de ser lo suficientemente proactivo como para adelantarte, con creatividad y valentía, siempre tomando las decisiones y su responsabilidad.
Si has realizado un buen ejercicio en tu yo interior, si has conseguido instaurar un sistema de productividad personal, convertirte o realizar acciones de proactividad en los momentos adecuados, será una extensión de tu propia naturaleza que has cultivado. Si esos pasos previos la productividad será una chispa que puede acabar en explosión involuntaria.
Equipo
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A menos que seas un ermitaño, perdido en una distante montaña, sin comunicación con el exterior, una de tus aptitudes debe ser el equipo. No como cuando te preguntan en una entrevista si eres capaz de trabajar en equipo. Aprender a trabajar en equipo requiere conocerlo y no sólo en términos profesionales, sino a un nivel personal. Las personas se mueven por necesidades y estados de ánimo, conociendo a cada integrante de tu equipo podrás apoyarte en ellos y a su vez darles soporte cuando lo necesiten.
Las maquinas requieren de que todo el conjunto de sus piezas estén correctamente funcionando, se proactivo conociendo a tus compañeros, a tus responsables, clientes y proveedores. Crea proyectos para reforzar las relaciones con cada uno de ellos, apóyate en tu proactividad y en la productividad personal para que todo a tu alrededor funcione, tu puedes hacerlo funcionar.
Conocimiento
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La información debe fluir, asegúrate que eres lo suficientemente transparente y comunicativo para que tu proyecto y los conocimientos que vas adquiriendo y necesitas estén bien visibles. Comparte todo lo que aprendas e infórmate de todo lo que aprenden los demás o quienes son las personas que disponen de los conocimientos. Documentar los proyectos, las decisiones, no sólo te sirve como material de referencia sino como base para que otros se incorporen a los proyectos o para que tú puedas delegar sin temor.
Si no dispones de los conocimientos, busca a la persona más adecuada, fórmate o pide que te formen en ello. Tus proyectos necesitan de buenas decisiones y estas deben estar tomadas por experiencias y conocimientos. De nuevo necesitas volver a la base, conocer al equipo, ser proactivo, disponer de un sistema de productividad personal y conocerse a uno mismo para ser capaz de aprender y enseñar.
Tú eres la empresa
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Este es el cambio paradigmático más drástico: Tú eres la empresa. No eres un trabajador, no eres un empleado, no eres un obrero, esas etiquetas son meras disciplinas jerárquicas con pretensiones demasiado arcaicas. Tú como persona eres tu propia empresa y estableces una relación de colaborador o nodo con otras empresas para la realización de los proyectos. Este cambio te da la libertad para pensar y decidir como entidad propia, aportando lo que el proyecto necesite en cada momento.
Las nuevas relaciones laborales deben pasar por la independencia de cada individuo y establecer una relación íntegra y de confianza, sin estar basada en miedos o jerarquías de valores dominantes. La única forma de darlo todo para los proyectos es ser y sentirse completamente libre, la dedicación a ellos será máxima con todos nuestros conocimientos y experiencia.
La diferencia entre el ahora y esta relación es la predisposición para entablar estos cambios y reflejarlos, para que los vínculos que te unan a los proyectos estén completamente claros por ambas partes contractuales.